martes, septiembre 09, 2014

SRI LANKA. 8 de setiembre. Inicio del Postulantado

Más aún, sigo pensando que todo es pérdida en comparación con lo sublime que es conocer a Cristo Jesús, mi Señor. Por él renuncié a todo, y todo lo estimo basura con tal de ganar a Cristo” (Fil. 3,8)

Las hermanas de la comunidad de Sri Lanka queremos compartir la alegría de tener entre nosotras a cuatro nuevas postulantes. Damos gracias al Señor por el don de la vocación y pedimos para ellas la perseverancia en su experiencia vocacional. También agradecemos a sus familias que han ofrecido generosamente a sus hijas para el servicio del Señor y de la Iglesia, en nuestra Congregación.
Como comunidad, decimos junto a María, que celebra su cumpleaños hoy: "Proclama mi alma la grandeza del Señor" en actitud agradecida por todas las maravillas que Dios ha obrado en Shanthi, Dayola, Vigini y Jayanayagi. Con ellas, todas renovamos nuestro "SÍ" de seguir al Señor en el camino del amor.                                                                   Comunidad de Sri Lanka

 

lunes, septiembre 01, 2014

CON FE ... EN ORACIÓN


El 30 de agosto 2014 participamos en la peregrinación a la ermita de Nuestra Señora de la Iglesia, en Matara. Esta peregrinación fue organizada por la parroquia del Sagrado Corazón de Jesús, de Rajagiriya (Sri Lanka). Fue un tiempo de fe y oración profunda: rezamos el rosario por la paz, oración ante el Santísimo Sacramento, recibimos el sacramento de la Reconciliación y celebramos la Eucaristía.
Desde los comienzos de la evangelización en Sri Lanka, se considera a Nuestra Señora de Matara como la Virgen de los milagros. Entre ellos, el que durante el Tsunami del 2004 fue arrastrada por las olas, al igual que mucha gente, y milagrosamente llegó de nuevo a la Iglesia. El párroco de Matara  compartió con nosotros una historia: en una ocasión una familia venía con un niño de cuatro años que no hablaba en absoluto. La familia pidió la intercesión de María. Mientras volvían, a sólo un kilómetro y medio de la Iglesia, el niño comenzó a hablar. Se apresuraron a regresar al santuario para agradecer a Dios y a la Virgen el favor recibido.
Tuve el privilegio de compartir con el grupo de la parroquia, dando gracias por la fe y por la presencia de Dios en este lugar mariano. Los milagros ocurren, también, todos los días en nuestras vidas. Es importante abrir los ojos para ver que Dios obra.
Frigi