Recordamos hoy el
nacimiento de María Antonia París, fundadora con S. Antonio María Claret, de las RR. de María
Inmaculada Misioneras Claretianas. Nació el Vallmoll, a cinco km al sur de
Valls, en la provincia y diócesis de Tarragona, el lunes 28 de junio de 1813.
Su padre había muerto en abril de ese año. Su madre, Teresa, había llegado a la
Villa huyendo de las fuerzas napoleónicas. Al día siguiente festividad de San Pedro
y San Pablo, la bautizaban y, poco después, volvía con Antonia y su otra hija,
Teresa, de tres años, a la casa familiar de Tarragona.
En 1841 María
Antonia, ingresó como postulante en la Compañía de María. Después de
experimentar el llamado de Dios a “algo nuevo”, deja la Compañía en 1851. Con
un grupo de jóvenes, el 15 de agosto, fiesta de la Asunción hacen voto de no
separarse y atravesar el océano. Se embarcan hacia Cuba, llamadas por S.
Antonio M Claret, el 22 de febrero de 1852, donde nace la Congregación de
Religiosas de María Inmaculada Misioneras Claretianas, el 27 de agosto de 1855.
Recordamos con
agradecimiento el nacimiento a la vida de M Fundadora como así también cada
nacimiento a la “novedad” que como congregación hemos vivido, procurando
responder a la voz de Dios y las exigencias de su Reino.
Acompañamos con la oración a las hermanas de las nuevas Provincias de Europa (España, Italia y Polonia) y Latinoamérica (Argentina, Colombia, Venezuela, Panamá, Perú) que, este 28 de junio de 2016, inician en Madrid y Perú la aventura de otra novedad de vida, con la creación de los ambos organismos, parte del proceso de reorganización que desde unos años viene llevando la congregación.
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