DESDE USA

CLAUSURA DEL AÑO JUBILAR – MUERTE DE NUESTRA MADRE FUNDADORA

El sábado 15 de enero nos dimos cita todas las hermanas de la Delegación en Miami. Pero no fue solamente una cita de hermanas sino una cita con todos los que de una manera u otra colaboran con nosotras en nuestra tarea de evangelizar por todos los medios.
Un grupo de 15 personas viajaron seis horas, desde la Diócesis de San Agustín, otro grupos viajó hora y media desde la Diócesis de Palm Beach y el tercer grupo fue de la misma Arquidiócesis de Miami, de diferentes parroquias. La cita para el Encuentro fue en la parroquia de St. Timothy.
Comenzamos con la oración de la Madre Fundadora meditada en inglés y español. Continuamos con una breve reseña de la vida de la Madre Fundadora. Mientras Regina lo hacía en español, Yoly la presentaba en inglés y Lili a los niños. Cada grupo tuvo la oportunidad de conocer y profundizar en la vida de Antonia. Cada grupo quedó impresionado con su mensaje, sobre todo con su deseo de renovar la Iglesia.
Olga nos llevó a profundizar en el temas sobre la Renovación de la Iglesia. Se les repartió una hoja con la Visión Inicial de la Madre. Cada grupo después de leerlo y compartirlo, dedicó tiempo para contestar “¿Cómo podemos renovar nuestra iglesia hoy?” En la puesta en común un representante de cada grupo fue dando la respuesta.
Antes de ir a la Eucaristía Ondina presentó el proyecto de iniciar grupos laicos claretianos que compartan nuestro mismo espíritu y carisma. En los tres lugares donde estamos hay personas interesadas.
Nos acompañó el arzobispo Wenski quien compartió una reseña histórica. El padre Tomas Marín nos presentó como miembros de su parroquia. Invitó a todos que pidieran por el aumento de vocaciones en nuestra Congregación para así poder atender las necesidades de su parroquia.
Al final del día, lo más bonito fue darnos cuenta del amor que nos tiene la gente, de su apoyo, su acogida y cariño. Todos daban gracias a Dios por nuestra Fundadora pero sobre todo por lo que nuestra Congregación hace por ellos. También había algunas personas que habían viajado a Miami desde West Palm Beach, no sólo porque nos quieren sino para conocer mejor a la Madre María Antonia como le llaman.
Damos gracias a Dios por nosotras las Claretianas en cada rincón el mundo. Damos gracias por ese carisma que nos dejó la Madre de renovar la Iglesia con la práctica y no con la ley.