Queremos compartir con ustedes lo vivido en la profesión de Caro. Primero que nada la presencia de las nuestras hermanas Silveria y Pilar que vinieron desde Córdoba para acompañar este motivo de fiesta y de alegría para toda la congregación dio a la misma un clima de unidad y alegría muy grande.
Una de las hermanas con muchos años de vida consagrada, como lo es Pilar compartiendo la celebración con la neo profesa fue un momento muy emotivo. "Salir de testigo en esta ceremonia fue una gran sorpresa inesperada y con la juventud acumulada y averiada estar presente entre tanta juventud me sentí muy cómoda y tan cómoda que todavía siendo hoy día 18, sigo en Mendoza compartiendo con las tres jóvenes de esta comunidad".
La ceremonia fue muy sencilla y solemne, la familia de Caro viajó desde Campana para acompañarla en este paso tan importante que iba a dar.
El Padre Marcelo Debenedectis presidió la ceremonia y concelebró el Padre Luis Atencio. La frase elegida de Caro para su profesión fueron las palabras pronunciadas por la Madre Fundadora antes de morir: "Nada más quiero ni deseo sino a Nuestro Señor" y su espíritu estuvo presente en toda la celebración.
Finalizada la Eucaristía y los saludos de la gente pasamos a compartir un ágape con los amigos más cercanos.
Damos gracias a Dios por este acontecimiento y la respuesta generosa de Carolina que desde lo más profundo de su corazón le dijo como María: "sí" al Señor.
Recemos por la fidelidad de nuestra querida hermana para que siga tras las huellas de Jesús hasta el fin de su vida con mucha alegría y entrega.
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